Una tarde ajetreada, un día de descanso o un momento de celebración; todos estos momentos son unidos por un protagonista clave: una copa de tu vino favorito. Relajante, delicioso e incluso un premio; así lo vemos todos los amantes del vino en el mundo.
Sabemos perfectamente que esta pasión va más allá de saborear bebidas frutales. Por ello, hemos recopilado algunos términos populares de la industria relacionados con las uvas para vinos. Aquí te compartimos la información más relevante para ayudarte a saber más sobre tus sabores favoritos.
Aquí inicia la magia: tipos de uva para vino
Nuestro amor por el vino depende de un fruto exquisito para existir. Por ello, los expertos deben conocer todo sobre los tipos de uvas que dan vida a un vino delicioso. Bajo esta idea, podemos enlistar algunas palabras muy relacionadas con ello:
Para los mexicanos, escuchar la palabra Garnacha podría ser motivo de confusión con aquellos antojitos a base de masa y guisados. Sin embargo, en la viticultura, dicha palabra es el nombre de un tipo de uva tinta de origen español. Es tan popular que existen numerosas variantes genéticas como la garnacha blanca, la garnacha gris, la garnacha peluda, la garnacha roja, la garnacha rosada o la garnacha tintorera.
Por otro lado, es probable que hayas escuchado mencionar una palabra común al hablar de los tipos de uvas para vino: Tempranillo. Se trata de una uva tinta extendida en Ribera del Duero y en Rioja, España. Su nombre proviene de un juego de palabras, pues esta uva se recoge más “temprano” que otras de su localidad. Su mayor característica radica en otorgar notas muy frutales y sumamente aromáticas a la bebida.
Otro término de uso curioso en la industria es el de Macabeo, el cual hace referencia a una variedad de uva blanca de origen español con distintos nombres según las zonas en donde se cosecha. Ejemplos de estos son Viura o Alcañol. ¿Los habías leído antes?
Partes de uvas para vino
Ahora que hemos hablado de las palabras que identifican mejor a distintos tipos de uvas para vino, es importante conocer características propias de dichos frutos. Por ejemplo, debemos hablar del Hollejo, también conocido como Bagazo. Ambos términos hacen referencia a la cáscara sobrante después de exprimir las uvas y obtener el mayor jugo posible. Aunque te parezca muy enredado, en la industria el jugo obtenido de las uvas es llamado Mosto. De acuerdo con expertos, la calidad del vino final es proporcional a la calidad del mosto obtenido.
Una parte importante para las uvas llega en el Escobajo, también conocido como Raspón. Por más cómico que parezcan los nombres, son reales, y se refieren a las ramitas que sostienen a las uvas. En la industria del vino, es primordial cuidar el escobajo, pues es la parte encargada de brindar los nutrientes de la tierra a la fruta final.
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