Cuando la pasión winelover llega a nosotros, no hay mayor gusto existente que aquel de potenciar sabor y aromas del vino con alimentos, mezclas y cualquier accesorio que brinde frescura a nuestra experiencia gourmet.  Si te identificas con este principio, entonces debes conocer los decantadores.

Podrías llegar a pensar que un decantador resulta simple y sencillamente una jarra de vino muy linda, sin embargo, su funcionalidad va más allá de servir una buena cantidad de líquido en su interior. Para que tengas mayor conocimiento sobre este accesorio del vino, destinamos el siguiente espacio. Toma nota y ve preparando tu cartera, pues seguro querrás hacerte de uno.

¿Qué es y cuál es la función de un decantador?

Seguro has notado que cuando una persona cata vinos mueve la copa para agitar su líquido. ¿Por qué lo hace? La respuesta está en la oxigenación: un proceso fundamental para disfrutar los aromas del vino y su sabor mismo. Y es que cuando un vino es vertido en su botella y pasa un buen tiempo almacenado, sus elementos podrían permanecer ocultos hasta que son expuestos al oxígeno.

Para no hacer la tradicional práctica chocolatera de pasar el líquido de un envase a otro, los expertos en vino han desarrollado los decantadores: piezas de cristal o vidrio cuya función principal es facilitar la oxigenación del vino de una forma eficiente y elegante.

Además de esta tarea principal, los decantadores ayudan a separar cualquier residuo sólido o sedimento presente por la propia elaboración de la bebida. Así, al usar un decantador, liberas todo su potencial, pues los cambios son bastante notorios. 

Accesorios del vino que impulsan su sabor

Los decantadores son accesorios del vino que permiten despertar sus aromas, colores y sabores. Su funcionamiento es bastante sencillo y de aquí se desprenden dos tipos de decantadores:

• Decantadores de máxima oxigenación: se trata de contenedores de cristal o vidrio elaborados con ángulos cerrados para que el vino servido en su interior se “rompa” al pasar por cada uno impulsando así el proceso.
• Decantadores de mínima oxigenación: son figuras de diseño simple, con ángulos abiertos o circulares que permiten al vino salir sin agitación alguna. 

Existen miles de modelos y tamaños disponibles. De hecho, hay algunas reglas de decantación para cada tipo de vino:

• Vinos reserva y gran reserva: requieren mayor tiempo de decantación para oxigenarse por su estancia en barrica. Se recomiendan decantadores de base ancha.
• Vinos crianza: aunque su tiempo en barrica es menor a los reserva o gran reserva, sí es necesario un tiempo considerable de oxigenación. Por ello, se sugieren decantadores medianos y fríos.
• Vinos jóvenes: contando los blancos y rosados. No requieren decantadores, sin embargo, sí pueden aprovechar decantadores pequeños y fríos para impulsar su sabor.

Usar uno de estos accesorios del vino es tan sencillo como abrir tu botella favorita, verterla cuidadosamente en el interior del decantador y esperar 40 minutos a que se oxigene. ¡Toma en cuenta este tiempo en la planeación de tu evento especial!